La energía marina es la explotación, uso o aplicación de la energía que lleva el agua en todas sus formas (océanos, mares, ríos, mareas, corrientes marinas, gradiente salino, gradiente térmico, etc.). Este tipo de energía (cuya explotación presenta grandes dificultades debido a las adversidades del mar) se transforma en electricidad que puede ser utilizada en las casas, negocios e industrias, aunque la idea no es nueva. Hasta ahora el uso rentable de estos tipos de energías ha sido muy bajo y se concentra en solo unos pocos países, como Canadá, Francia, EEUU, Reino Unido, China, India, Indonesia, Corea del Sur, Australia o Nueva Zelanda.
Se puede considerar que las energías marinas se encuentran en una fase de divergencia tecnológica en la que existen muchos conceptos en desarrollo pero ninguno ha demostrado su liderazgo comercial. Las energías marinas son una de las áreas de mayor crecimiento dentro de las energías renovables, existen muchos proyectos piloto en marcha, otros en fase de investigación y desarrollo ya que los océanos representan una vasta y enorme fuente de energía todavía sin explotar en forma de olas, corrientes marinas, gradientes salinos, gradientes térmicos, etc.
Las cinco fuentes renovables que la Agencia Internacional de la Energía considera dentro del ámbito de las energías marinas son:
Energía Undimotriz u olamotriz: es la energía que aprovecha el movimiento de masas de agua (olas).
Energía Maremotérmica o de gradiente térmico: es la energía que aprovecha la diferencia de temperaturas entre el fondo y la superficie de los océanos.
Energía Mareomotriz: es la energía que aprovecha las mareas.
Energía de corrientes marinas: es la energía obtenida de las corrientes marinas.
Energía Azul o de potencia Osmótica: es la energía obtenido a partir de la diferencia entre la concentración de sal del agua de mar y del agua de río. También se conoce como energía de Gradiente Salino.
Según la Agencia Internacional de la Energía (AIE), las energías marinas tienen un enorme potencial de crecimiento en los próximos años, solo la generación de energía a partir de las olas (energía undimotriz u olamotriz) y de las mareas (energía mareomotriz) se incrementará desde algo menos que 1TWh en 2010 hasta casi 60 TWh en 2035 y con potencia instalada que crecerá desde menos de 1GW en 2010 hasta 15GW en 2035.
La energía mareomotriz está limitada por la elección de adecuadas localizaciones debido a los condicionantes de viabilidad económica, siendo necesaria una gran altura de mareas y proximidad a líneas de transporte eléctrico para considerar el emplazamiento viable.
La energía undimotriz tiene un notable potencial de crecimiento y de contribuir al aumento de demanda eléctrica, pero todavía son necesarios desarrollos tecnológicos para reducir sus costes y mejorar su rendimiento. Esta situación es vista por muchos profesionales, emprendedores y empresas como una oportunidad para crear valor, empresas, nuevos proyectos, trabajos y negocios en esta área en los próximos años.
