En los últimos años ha aparecido un nuevo invento en las noticias: los drones (también conocidos como RPA, del inglés remotely piloted aircraft, ‘aeronave pilotada remotamente’). Esta novedad remite al ámbito de la tecnología, pero ¿qué es exactamente un dron? Un dron es un vehículo aéreo no tripulado. Actualmente los drones tienen múltiples aplicaciones, desde el ocio hasta el uso empresarial o militar. Los drones se pueden utilizar con numerosos fines: grabar y visualizar en tiempo real, desde distintas alturas, todo tipo de eventos (deportivos, musicales, manifestaciones, etc.);en situaciones de emergencia, transportar medicamentos y utensilios médicos a zonas de difícil acceso; llevar a cabo tareas de vigilancia y seguridad; controlar y prevenir de un modo más eficiente incendios forestales; desarrollar investigaciones científicas o peritar daños en seguros. Realmente, hay muchas más aplicaciones y cada día surgen nuevas funciones y utilidades de esta nueva tecnología.
El uso de drones está regulado en España por el Real Decreto-ley 8/2014, de 4 de julio, de aprobación de medidas urgentes para el crecimiento, la competitividad y la eficiencia, en cuya sección quintase recoge el régimen temporal para las operaciones con aeronaves pilotadas por control remoto de masa inferior a los 150 kg al despegue. Dicho régimen establece las condiciones de explotación de estas aeronaves para la realización de trabajos técnicos y científicos. Esta normativa ha sido tramitada como Ley 18/2014, de 15 de octubre, de aprobación de medidas urgentes para el crecimiento, la competitividad y la eficiencia. Esta nueva regulación responde a la necesidad de establecer un marco jurídico que permita el desarrollo en condiciones de seguridad de un sector tecnológicamente puntero y emergente. Actualmente, el Gobierno está trabajando en una nueva normativa que modificará el Real Decreto 552/2014, de 27 de junio, por el que se desarrolla el Reglamento del aire y disposiciones operativas comunes para los servicios y procedimientos de navegación aérea y se modifica el Real Decreto 57/2002, de 18 de enero, por el que se aprueba el Reglamento de Circulación Aérea.
La Agencia Estatal de Seguridad Aérea se encarga de la regulación de operaciones con drones de hasta 150 kg. Para drones que superen este límite, se ha establecido una normativa a escala europea; el organismo encargado de regular estas aeronaves es la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA, su sigla en inglés).
Para poder ser piloto de drones es obligatorio demostrar que se poseen los conocimientos teóricos y prácticos necesarios, así como ser mayor de edad y estar en posesión de un certificado médico adecuado. Es muy útil la sección de preguntas frecuentes de la web de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea. En esta sección se responden dudas como las siguientes: qué se puede hacer con un dron, con arreglo a la actual regulación; qué requisitos necesita cumplir un dron para poder volar legalmente; si se necesita un seguro para realizar trabajos aéreos o vuelos especiales con un dron, o bien qué tipo de seguro se requiere para pilotar un dron, con qué límites de cobertura y cuáles son los requisitos de las compañías aseguradoras.
Mención aparte de su uso militar y empresarial, los drones se están convirtiendo en un elemento de uso recreativo con un crecimiento importante de usuarios. De hecho, los drones ya se incluyen entre los regalos en época navideña. En el ámbito del ocio, los modelos de drones van mejorando en prestaciones y funcionalidades, lo que aumenta también la complejidad de su uso. En el mercado ya existen modelos de drones para uso recreativo, muy baratos, sencillos y fáciles de manejar. Una de las utilidades con más demanda en el uso de drones para ocio es la incorporación de una cámara para grabar desde distintas alturas.
